miércoles, 16 de mayo de 2012

SAN ISIDRO LABRADOR.


San Isidro Labrador
madrileño y hombre de campo
trabajó con gran amor
con unos bueyes arando.
Siempre feliz y contento
y por un amo mandado
acudía a los terrenos
para muy bien trabajarlos.

Por ello supo ganarse
del amo mucha atención
y de todos granjearse

afecto y admiración.
Y como era cumplidor
y al amo favorecía,
terrenos a su favor
llegó a dejarle en su día.

El terreno que a él cediera
el amo por atención,
los mejores frutos fueran
como milagro de Dios.

En casa todo era paz.
El rosario se rezaba,
con mucha felicidad
en su hijo Juan se miraban.

Pero un día quiso Dios
que algo triste sucediera,
a un pozo Juan cayó,
San Isidro le salvó
demostrando lo que era.
COMO AYER FUE SAN ISIDRO UNA POESIA EN SU HONOR.

No hay comentarios:

Publicar un comentario